Cuando se padece un cuadro de depresión, solemos caer un abatimiento profundo que nos provoca una enorme sensación de ansiedad que afecta a todo los ámbitos de nuestras vidas. La familia pasa a un plano secundario y nuestro entorno se convierte en un lugar hostil y lleno de desesperanza, perdiendo en muchas ocasiones la ilusión de conseguir una vida mejor e incluso se puede llegar a perder las ganas de vivir.
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Prisma
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