martes, 13 de septiembre de 2011

Trastornos alimentarios no reconocidos


Más allá de los trastornos alimentarios reconocidos, como la anorexia y la bulimia, que la mayor parte de nosotros conocemos debido a su repercusión en la sociedad, hay otros, que no por ser menos conocidos, son más leves, ya que también pueden poner en riesgo nuestro metabolismo, además de afectar a nuestro equilibrio mental.

Hay bastantes trastornos alimentarios no reconocidos, ya que el número de ellos se ha incrementado en los últimos años debido al culto por el cuerpo y otras modas por el estilo, pero nosotros hablaremos de los que más repercusión están teniendo, como son la ebriorexia (conocida como Alcohorexia también), la vigorexia, la diabulimia y la ortorexia.

Ebriorexia – Es un trastorno que en un 90% lo sufren mujeres jóvenes y consiste en una mezcla de alcoholismo, bulimia y anorexia, en la que la gente joven se priva de comer o se pega atracones, vomitando después, para luego poder ingerir grandes cantidades de alcohol sin preocuparse por la cantidad de calorías que aporta.

Vigorexia – Es un trastorno por el cual el que lo padece siempre se encuentra enclenque, no deja de mirarse al espejo y compararse con culturistas, acabando en un trastorno obsesivo-compulsivo que tiene al que lo padece todo el día haciendo ejercicio o encerrado en el gimnasio.

Diabulimia – Se trata de una combinación de diabetes y bulimia. La obsesión por adelgazar lleva a enfermos de diabetes tipo 1 a evitar las inyecciones de insulina que necesitan con el propósito de reducir su peso corporal, poniendo en riesgo su organismo, y corriendo incluso riesgo de muerte.

Ortorexia – Se caracteriza por una extrema obsesión por consumir únicamente alimentos que provengan de la agricultura ecológica, sintiendo aversión por los de otra procedencia, y controlar la cantidad de calorías y nutrientes que ofrece cada comida. Generalmente la padecen las mujeres.

Todos estos trastornos alimentarios pueden causar un deterioro de la salud física, al no llevar una dieta equilibrada, por lo que es necesario acudir a un especialista en salud mental para erradicar estos comportamientos obsesivos lo antes posible.

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